RESUMEN 1 CAPITULO EL SILENCIO DE LAS PALABARAS
Observé el hielo de la acera, que hasta ahora no la había visto solo en los trocitos de hielo de judías rojas. Tuvimos mucha suerte de que uno de los pisos del señor N quedara libre, en el coche no me podía estar quieta solo miraba por la ventana buscando un rascacielos pero no vi ninguno.
La tía paula nos estaba diciendo por el camino que el piso lo tendríamos que arreglar un poco, nos dio unos regalos y nos dejo en el portal de la casa mi madre abrió la puerta y me dijo que me quedara hay mientras ella subía para verlo por si había algo o alguien.
Una vez arriba me digo que podía subir, allí me encontré en una cocina minúscula, las ventanas estaban rotas, había cucarachas muertas en el suelo, una puerta en la cocina que daba al baño, en el suelo había un colchón de matrimonio con muchas manchas, todo estaba lleno de polvo, había un escritorio con una pata diferente en la que haría los deberes.
En el tiempo que limpiaba nos quedábamos en casa de la tía paula, cuando llegamos a su casa que era muy lujosa salude a mis primos y nos enseñaron la casa.
A la mañana siguiente cuando nos despertamos la tía paula y el tío Bob ya no estaban se habían ido a llevar a lo niños al colegio y a trabajar en la fabrica, vimos una nota en la que ponía que la tía paula vendría a media mañana.
Cuando vino nos dijo que al final mama no iba a cuidar de los niños por que no quería que volviera a enfermar, ni que contagiara a ninguno de sus dos niños, entonces le digo que no se preocupara por que le había conseguido otro trabajo en la fabrica.
A los 3 días mamá y yo ya habíamos acabado de limpiar el piso aunque las cucharas seguían saliendo y las ratas también, mamá me dijo que no me preocupara que todo iba salir bien, que ella había hecho todo lo que pensaba mejor para mí por que aquí tendría un futuro y podría estudiar de lo que quisiera.
Al día siguiente yo empezaba el colegio y mamá me digo que me iba a pedir que después del colegio me fuera a la fabrica por que no quería que estuviera tanto tiempo sola en aquel piso y también para que la ayudara...
MARTA LÓPEZ GARCÍA
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